lunes, 27 de junio de 2011

Testamento de Juan (el poeta maldito que se suicidó porque decía que nadie comprendía lo que él escribía)

1-Mi corazón es todo tuyo
   (ya no tengo necesidad de andar disimulándolo)
   Mi cabeza que se la quede el que la encuentre
   (suerte en pila)
   A mi cuerpo que se lo trague la tierra,
   que sea pasto, planta, flor
   (marchitaré por fin con la llegada del invierno)
   A mi alma que se la coman los gusanos
   (buen provecho, a mi de poco me ha servido)
   Mis versos inconclusos son para el espectro aquél
   que entró por mi ventana la noche en que soñé que me moría.
   (a este sueño me lo llevo conmigo)
   El resto no interesa:
   pueden hacer lo que quieran.

2-Me voy sumergiendo en un manto de terciopelo negro,
   desnudo
   me deslizo lentamente como la miel en el cristal
   mientras el sol, en lo alto,
   destella penosamente a través de la lluvia sutil de plumas negras
   que caen sobre mi.  
   Los buitres tejen en el cielo la danza a de las presas malheridas,
   y yo sigo deslizándome,
   sigo descendiendo
   lentamente,
   y entonces el sol se empaña con lágrimas de emoción
   y yo me sigo hundiendo más y más
   y entonces siento como el terciopelo me abraza
   y me envuelve
   y yo ya casi no puedo respirar…
   Sé que es el final:
   …No se siente tan mal


3-Epílogo/maldición:
   Que la fauna del bosque entero enmudezca de pronto,
   que la brisa nocturna silencie su bullicio de ramas y hojas
   de una vez y para siempre,
   bajo la noche eclipsada de mi muerte
   (a la luna también me la llevo conmigo)

3 comentarios:

  1. Sr.Mameluco: Ud entra claramente en la patología -nunca bien dignamente apreciada- del romántico baudeleriano postmoderno. No le voy a mentir, flor de patología se busco.
    Déjeme decirle que el epilogo es para hacer una reverencia mientras saludo con la galera - (inserte aqui onomatopeya de aplausos) -.

    Le dedico una pieza de baile, y tres cuartos de sonrisa misteriosa (apa!).

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  2. Sta. Wu: le agradezco por la confianza, pero le recuerdo que el poema pertenece al nunca bien recordado señor Juan (yo no sería capaz de generar tanta oscuridad y decadencia, recuerde que lo mío es más bien el pop: mucho color, mucho flúor, mucho oso con ukulele, etc)

    De todas maneras me voy a apropiar de esos tres cuartos de sonrisa misteriosa y me guardo la promesa de esos pasos de baile.

    Saludos cordiales (sin coreografías ni gongs: hoy estoy de estrella)

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  3. aveces el mas fluo de los colores esta hecho con el mas oscuro de los pigmentos

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